15 de mayo de 2012

LOBO



                                        
A Paolo Caruso siempre lo llamamos Ruso. Con los años devino psicoanalista dejando atrás estudios de Antropología e Historia. Separado dos o tres veces, divorciado una. Nunca trabajamos juntos, somos amigos desde la infancia. Mis hijos le adoran.
Ruso solía buscar refugio en Marcia de vez en vez. Un poco de charla, un poco de caricia. Pintora surrealista que se sostiene retratando turistas, conoció a Ruso en una fiesta: lo sacó a bailar, lo llevó a su refugio, le contó una sarta de mentiras sobre la familia, lo aburrió con sus extremas y literales cicatrices.   

A mi vez conocí a Marcia en el bar under cuando inauguró una exposición de pinturas encapotadas, violentas. Aguanté al gentío que chirria, bebe, empuja, por acompañar a mi amigo y por los padres de ella (cohibidos, sonriendo a nadie) en aras de ofrecerles apoyo entre tanta manía y percings.
Y allí mismo, en cuanto los invitados zarparon, Marcia propició quedarse sola conmigo. ¿Tenés un minuto? Tengo. ¿Puedo contarte algo? Por supuesto.
Después de años de amistad (semi) platónica, a partir de escarceos amorosos alto voltaje, Ruso ha desarrollado celos satánicos. Mezclando pasado –claro,hubo otros hombres- con un presente de supuesta seducción a turistas que nunca pasó de coquetearles tanto como ofertar caricaturas amerita.
Ruso cimenta los celos revisándole cajones. O espiándola. La controla, persigue; fiscaliza faldas pantalones bermudas; veta tops y sandalias... Continuó así Marcia entremezclando protohistoria con trances imposibles, todo junto, sin reparar en gastos, hasta quedar exhausta.
Escuché muda, se sobreentiende.
Confieso haber pensado que Marcia muestra algo a los hombres y algo a las mujeres indefinible. Perturbador. Pero pensar tal cosa mientras Marcia acongojada se asincera, es repudiable. Me prohibí la idea.
El hombre celoso es un lobo. 





foto: Genoveva Ayala 

2 comentarios:

  1. Falto decir que la mujer celosa es una hiena.

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  2. Es una invitación a escribir una historia cuyo colofón fuera: La mujer celosa es una hiena.
    U otra que aludiese a esos vínculos indisolubles cuya argamasa son lo celos. Y a los celos en relaciones distintas de la pareja.
    Intentaré coumpliIr con esta invitación. Los omnipresentes celos y la ficción lo permite!

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