26 de mayo de 2012

EN ESPERA





                                                    
Embarazo de riesgo le diagnosticaron a Thelma en cuanto ingresó; permanecerá internada al menos 72 horas para una revisión. Se instaló en posición fetal, por encima de la cobija, sin descalzarse, con Jan Garbarek estallando los auriculares pues teme revivir el asco y la sapidez metálica en las encías, cierto vaho cierta luz filosa, pies agarrotándose en los estribos de la camilla más desnudez cubriéndose el pecho y el adusto médico y el chillido del instrumental...
¿Cuándo fue? ¿Dónde fue?
Cuatro años ha. Entonces fue. En la misma clínica.
Tras romance pasajero con un señor ídem resultó embarazada. Ella bajo ninguna circunstancia tendría una criatura. No así, no en esa etapa.
Le recomendaron la clínica de obstetricia donde bajo cuerda practican abortos. Esperó en un saloncito –rosa salmón desde cielorraso a cortina falso brocato y flor artificial- en el que caen uno a uno los minutos del reloj empotrado. Calma. Después, en un corto después, arribó en silla de ruedas una mujer joven, tan joven, casi una niña con descomunal abdomen; la transportan un par de enfermeras pechugonas cofia extremo almidón gatillando consejos en yunta. La dejan a su lado. Ni la mira.
Miedo y miedo: ella de parturienta, yo de aborturienta, dice Thelma.
Tras cartón apareció un hombre también muy joven con carpeta y bolso y una pequeña canasta; sonríe empujando la silla de ruedas hasta el final del pasillo a la espera de los ascensores. Es ahí cuando la joven voltea y mira a Thelma. Quizás le desea suerte. Quizás, dice Thelma.  

Acurrucada espera. Garbarek en sus oídos en su cerebro. Embarazo de riesgo ya le advirtieron pero va a luchar. Desea un bebé en la situación que está. En este momento. 
Lo planteó sesión a sesión. Y respeto -como mujer, como su analista- su certidumbre más allá de lo que opino.





2 comentarios:

  1. Marta,

    Lo
    Describes a la perfeccion.... Hace años acompañe a una amiga en la misma situacion: aborto sin problemas.
    Despues tuv embarazo de riesgo, el BB nacio sano. Ah es una mami feliz con dos vastagos encantadores.

    Suerte y muxos besitos,

    Ann@ Genoves

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  2. Anna: gracias por tus palabras.

    El embarazo sin riesgo todavía es más materia de la ficción que de la realidad. Al menos en ciertos países, para ciertas mujeres, en ciertas historias.
    El personaje de este relato quizás quiera tener un hijo a pesar de estar sola o que el padre es pasajero o que no sabrá/podrá contenerlo. Y la analista esperemos que haya logrado, más allá de respetar esa decisión, al menos señalarlo.

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